Las patas de gallo, son las clásicas líneas o arrugas que surgen a lo lados de los ojos con el paso del tiempo. Existen otros factores a parte de los medioambientales que pueden favorecer su aparición, como es el caso del tabaco.
El tratamiento con toxina botulínica es una las soluciones mas sencillas y eficientes para luchar contra el envejecimiento facial. El tratamiento con botox puede ser utilizado en un rango de edad muy amplio, aunque lo ideal sería en pacientes de más de 35-40 años.
El botox utilizado en el ámbito de la estética facial puede ser utilizado en muchas zonas del rostro aunque en el tercio superior facial sus resultados son muy naturales, reduciendo de una forma considerable, sin efectos secundarios y de una manera muy rápida las patas de gallo. Uno de los efectos que más notan mis pacientes está en la mirada. La toxina botulínica consigue una mayor apertura de los ojos con lo que el efecto es un rejuvenecimiento de la mirada.
En Maxilo tenemos amplia experiencia en este tipo de tratamientos, es muy importante su indicación y la dosificación usada para que los resultados sean un éxito y percibidos de la forma más natural posible.
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