La implantología ha evolucionado hacia una ciencia clínica bien conocida. La evolución de la investigación y la compresión de los conceptos biológicos en implantología han provocado muchas controversias. Se han ido desarrollando y cambiando teorías y técnicas, y los tipos de materiales utilizados han cambiado mucho. Un área de expansión de conocimientos y de conflictos esta relacionado con el mantenimiento de los implantes dentales. El mantenimiento de los implantes tiene una relación directa con el éxito del implante a largo plazo. El mantenimiento de la buena salud del tejido periimplantario influye en los factores de éxito de los implantes.
Las diferencias entre las características biológicas de un diente y un implante hacen más susceptible a los implantes dentales a la inflamación y a la pérdida ósea en presencia de acúmulo de placa bacteriana. Si no se actúa en eliminar la placa bacteriana con métodos mecánicos o químicos corremos mayor riesgo de fracaso del implante dental. Si no se practican unas medidas adecuadas de higiene oral (cepillado, seda dental) la zona será colonizada por bacterias. Si no se trata, se producirá una pérdida ósea importante y movilidad, lo cual lleva al fracaso del implante que estaba inicialmente integrado.
La mucositis periimplantaria es un cambio inflamatorio de los tejidos blandos que rodean el implante. El principal factor etiológico es la placa bacteriana. La mucositis periimplantaria es reversible una vez eliminado el agente etiológico, que es la biopelícula de la placa. Si progresa, puede convertirse en una periimplantitis con pérdida de la integración del implante.
Higiene oral
La remoción de la placa supragingival con el uso del cepillo puede disminuir significativamente la cantidad y composición de los microorganismos subgingivales, lo que se traduce en un menor riesgo de inicio o recidiva de la enfermedad periodontal. Los pacientes parcialmente desdentados presentan más bacterias patógenas que los pacientes edéntulos y ello puede hacer que se diseminen las bacterias de un sitio a otro. La prótesis definitiva debe permitir la higiene al paciente. Debemos instruir al paciente en el uso de cepillos, seda, cepillos interproximales e irrigadores. Las instrucciones al paciente pueden incluir el uso de gluconato de clorhexidina.
Mantenimiento de los implantes
Son necesarias las revisiones frecuentes después de la colocación del implante y las restauraciones para evaluar y establecer unas buenas medidas de higiene oral después del tratamiento. Los tejidos sanos no deben tener inflamación, lo cual indicaría la presencia de placa. Las visitas de revisión sirven también para detectar problemas potenciales y actuar cuanto antes. En algunas ocasiones serán necesarias técnicas de limpieza subgingival para eliminar placa de la forma mas suave posible. Si los procedimientos de mantenimiento e higiene no mejoran de manera adecuada, puede ser necesaria una corrección quirúrgica para disminuir la inflamación e infecciones crónicas.
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